jueves, julio 31, 2014

Por qué los perros se huelen el trasero

Por qué los perros se huelen el trasero

Hocico de perro
Todos los perros lo hacen: olfatear el trasero de otro can es lo más normal del mundo.
Pero, ¿por qué lo hacen?
Aunque parezca una pregunta muy simple, la respuesta no lo es tanto, y es, incluso, más interesante de lo que parece.
El secreto, tal como asegura la Sociedad Química de Estados Unidos (ACR, por sus siglas en inglés) en un video educativo, está en la química.
Los perros tienen, como es sabido, un olfato muy desarrollado. Tanto, que se estima que es entre 10.000 y 100.000 veces más sensible que el olfato humano.
Y cuando dirigen sus hocicos al trasero de otro perro, lo que hacen es recolectar un montón de información sobre el otro animal, desde lo que come hasta su género o su estado emocional.
Es algo así como conversar a través de la química. De hecho, este es solo un ejemplo entre muchos de comunicación química en el reino animal.
Perros oliéndose el trasero
Una forma de compleja comunicación química.

Diálogo de secreciones

En 1975, el científico George Preti, experto en feromonas y olores humanos del Centro Monell de Química de los Sentidos, estudió las secreciones anales de perros y coyotes e identificó los componentes principales de las secreciones que producen las glándulas alojadas en dos pequeñas bolsas llamadas sacos anales.
Este lenguaje químico, observó Preti, está compuesto de trimetilamina y varios ácidos grasos volátiles, y el aroma puede cambiar de acuerdo a la genética y el sistema inmunológico del animal.
Pero además, lo interesante es saber cómo hacen los perros para percibir y procesar este "mensaje" químico.
Los canes, explican los expertos de la ACR, tienen un sistema olfativo auxiliar llamado órgano de Jacobson o vomeronasal.
Diseñado específicamente para la comunicación química, este órgano tiene sus propios nervios que se comunican directamente con el cerebro.
Por lo tanto, no hay interferencias de otros olores y el órgano de Jacobson puede dedicarse sin distracciones a leer las "tarjetas de presentación" químicas de sus amigos perros.

Otros expertos en mensajes olorosos

Los canes no son los únicos que se comunican con olores. La naturaleza ofrece numerosos ejemplos, aquí te contamos una selección de los más curiosos:
El perfumista:
Murciélago de sacos
El murciélago de sacos combina secreciones para crear aromas.
El murciélago de sacos es un experto en el arte de la comunicación química que no solo segrega sino que mezcla aromas para atraer hembras.
Estos animales viven en colonias divididas en harenes, cada uno con un macho y varias hembras. Los machos marcan su dominio territorial con secreciones de una pequeña glándula llamada gular ubicada debajo de la barbilla.
Pero para cortejar a las damas, no basta con un solo olor: hace falta una mezcla de esta secreción con otras producidas por sus genitales y orina, que los machos preparan cuidadosamente cada día dentro de unos sacos especiales que tienen en sus alas, tal como explica Jason Goldman, de BBC Future.
Aunque el resultado puede resultar hediondo para el olfato humano, el "perfume" de estos murciélagos requiere un complejo proceso que luego, gracias a un oportuno batir de alas frente a la hembra, emanará para seducirla.
El antílope negro y su poderoso afrodisíaco:
Antílope negro
Los antílopes se comunican con el olor de sus ágrimas y excrementos.
Este mamífero que habita en la India, Pakistán y Nepal, tiene un método curioso, y sin duda oloroso, para atraer la atención de las hembras.
Además del aroma segregado por sus glándulas lagrimales en época de celo, los machos comunican sus intenciones con sus excrementos.
En lugar de perseguir a las hembras, los antílopes producen un buen montón de heces y las esperan rodeados de este peculiar olor afrodisíaco, una estrategia que fue registrada por BBC Nature.
El arma aromática del lémur de cola anillada:
Lémur de cola anillada
Los lémures de cola anillada se baten en "combates" de olores.
Estos primates de la isla de Madagascar tienen una extraña forma de pelear por el territorio: los machos se restriegan la cola con unas pequeñas glándulas que tienen en las muñecas y luego la agitan para desparramar el aroma.
Es despliegue suele bastar para marcar la jerarquía, aunque a veces no se puede evitar el combate cuerpo a cuerpo.
Además, sacudir la cola "perfumada" también sirve para atraer hembras, según explica BBC Nature.

Contexto

¿Existe el riesgo real de una epidemia global de Ébola?

¿Existe el riesgo real de una epidemia global de Ébola?

El Ébola se ha cobrado desde inicios de año al menos 670 víctimas mortales en África occidental. ¿Puede trascender las fronteras del continente y convertirse en una pandemia global?
La Organización Mundial de la Salud sigue hablando de "brote". Así lo califica en su más reciente informe, fechado el 27 de julio. Antes, en un comunicado del 14 de julio menciona una "tendencia epidémica actual", siempre dentro de África occidental.
En Reino Unido, la dificultad que los equipos médicos están teniendo en Guinea, Liberia y Sierra Leona para controlar la infección y el caso del liberiano que murió a causa del virus en Lagos (Nigeria) llevó al secretario de Exteriores, Philip Hammond, a calificar el Ébola de una "amenaza" para el país. Sin embargo, admitió que ningún británico se ha visto afectado y no se ha detectado casos en el país.
En esa línea, las autoridades sanitarias emitieron una alerta nacional dirigida a los médicos del país.
¿Cuánta base hay para encender las alarmas?
"No estamos ante un grave peligro de una pandemia global, pero sí de una posible propagación más extensa del ébola en África"
Jeremy Farra, epidemiólogo
El epidemiólogo Jeremy Farra, una figura líder a nivel mundial en el campo de las infecciones, prefiere mantener la calma.
"No estamos ante un grave peligro de una pandemia global que llegue a Norteamérica, Asia o Europa", dijo este miércoles a la BBC el director de la organización de promoción de investigaciones médicas Wellcome Trust y exprofesor de Medicina Tropical y Salud Global en la Universidad de Oxford.
Lo mismo opina el W. Ian Lipkin, otro experto en enfermedades virales y profesor de epidemiología en la Mailman School of Public Health en la Columbia University. Cree que es "improbable".
Ante la pregunta de la publicación National Geographic sobre si sería posible que alguien infectado con el Ébola en África occidental llevara la enfermedad a EE.UU., respondió: "Ciertamente es posible. Pero debido a nuestro sistema de salud es improbable. Seríamos capaces de contenerla (...). No creo que haya razones para el pánico ante una epidemia global de Ébola".
Sin embargo, el doctor Farra puntualizó: "Frente a lo que sí estamos, es ante una posible propagación más extensa en África"
Un hombre se limpia las manos en Liberia antes de cambiar dinero a un cliente.
Los expertos insisten en que las medidas de control de la infección son la única manera para frenar la epidemia.
Y como factor de riesgo para esa expansión, el experto señaló la densidad poblacional de países como Nigeria.
Con más de 178 millones de habitantes, es el país más poblado del continente; en él vive la sexta parte de la población de África.

Cierre de fronteras

Nigeria reaccionó con rapidez a la aparición de un primer caso en su territorio el martes de la semana pasada.
Nada más confirmarse que el ciudadano liberiano había muerto de Ébola, el gobierno ordenó cerrar el hospital de Lagos en el que éste fue tratado, y aislar al personal sanitario que estuvo en contacto con él.
Asimismo, en un intento de frenar la propagación del virus a otros países, el gobierno de Liberia mantiene las fronteras cerradas desde el domingo.
No se puede acceder al país por ningún paso fronterizo, salvo por el aeropuerto, donde se han implementado medidas especiales de detección de la enfermedad.
Personal médico del hospital de Donka, en Guinea, se prepara para una intervención en el área de aislamiento.
"En las clínicas de los países afectados el control es extraordinariamente difícil de llevar a cabo", según el epidemiólogo Jeremy Farrar.
Se trata de una medida desaconsejada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que argumenta que es ineficaz ante una enfermedad con un periodo de incubación de hasta 21 días.
En ese sentido, la OMS no impuso ninguna restricción de movimiento en el área, mientras que el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos simplemente está instando a los viajeros a Sierra Leona, Liberia y Guinea tomar "mayores precauciones".
Éstas incluyen evitar el contacto con los fluidos corporales de las personas potencialmente infectadas.

Control de infección

Una medida más eficaz que el cierre de fronteras es el control del contagio, según el doctor Farrar.
"Se puede evitar que (el Ébola en África) se transmita más allá si se aplican verdaderas y estrictas medidas de control de infección que impidan el contagio entre individuos, tanto en hospitales como en comunidades", dijo a BBC.
Virus del ébola.
Para evitar que el virus del Ébola se propague más allá, Liberia mantiene sus fronteras cerradas desde el domingo.
Algo no muy sencillo, como reconoció. Los países afectados, algunos de los más pobres del mundo, cuentan con escasos recursos.
"(Los centros de salud de estos países) no son como un hospital en el corazón de Londres, con todas las medidas para el control de infecciones. Son clínicas de barrio en áreas rurales en los que el control es extraordinariamente difícil de llevar a cabo".
Ante la pregunta de una futura vacuna o un medicamento, el experto asegura que no será aplicable a corto plazo y que definitivamente no estará disponible para frenar la epidemia actual.
"He mantenido conversaciones científicas con colegas de otras agencias y organizaciones de salud durante los últimos meses, y, sí, se espera que en algún punto haya fármacos o una vacuna, pero no van a estar disponibles en un futuro cercano. Toma mucho tiempo desarrollar estos".
Así que la única opción para frenar la expansión del Ébola en África, además del control de la infección, es la educación, dijo el epidemiólogo.
"Educación y trabajar con las comunidades es crucial, porque si la gente está enferma y no quiere acudir a centros a tratarse inevitablemente el Ébola continuará expandiéndose en sus comunidades, y así seguirá expandiéndose en Guinea, Sierra Leona y Liberia. Y el mayor temor es que esto alcance un centro urbano más grande, como Lagos, y a través de las comunicaciones de la ciudad, se expanda a lo largo y ancho de África".
En cifras

Contexto

martes, julio 22, 2014

Cortar el clitoris.. cada vez controlada

La ablación femenina, ¿cada vez más controlada?

La ablación femenina es muy traumática para aquellas que la sufren.
El mundo podría acabar con la ablación o mutilación genital femenina en solo una generación, según los líderes y activistas internacionales reunidos en la Conferencia de las Niñas que se celebra esta semana en Londres.
Pero la Organización Mundial de la Salud (OMS) no es tan optimista y advierte incluso del incremento de este tipo de mutilaciones en hospitales y ámbitos higiénicos.
Pero, ¿qué es la ablación y por qué se sigue llevando a cabo en millones de mujeres y niñas en todo el mundo?
La mutilación genital femenina incluye cualquier procedimiento que altera o daña los órganos genitales femeninos por motivos no médicos.
En su forma más grave, después de la eliminación del clítoris, los genitales se cortan y se cosen para que la mujer no pueda tener o disfrutar del sexo.
Además, se inserta una pequeña pieza de madera o caña para dejar una apertura para el necesario flujo de orina y de sangre menstrual cuando sea mayor de edad (la mutilación se realiza mayormente en niñas antes de que lleguen a la pubertad).
Cuando esté lista para tener relaciones sexuales o quedarse embarazada se le quitarán las costuras, y se vuelve a coser de nuevo para que siga siendo "higiénica, casta y fiel".
En las sociedades donde la ablación es común una mujer puede avergonzar a su familia y a sí misma si no se somete a ella.

Tipos de mutilación

  • Clitoridectomía - extirpación parcial o total del clítoris
  • Escisión - extirpación del clítoris y labios menores, con o sin los labios mayores
  • Infibulación - cortar, retirar y coser los genitales
  • Cualquier otro tipo de daño intencional a los genitales femeninos (quemar, raspar, etcétera)
Mutilación femenina
Muchas mujeres aceptan la ablación por temor a ser rechazadas por la sociedad.
Muy a menudo el procedimiento lo realizan aquellos que se dedican a la circuncisión o predicadores tradicionales, utilizando toscas herramientas que haya disponible, tales como pinchos, vidrio roto o cuchillas de afeitar, y sin anestesia.
El dolor forma parte de este ritual centenario, sirve para demostrar que la mujer es fuerte y lo puede soportar. También se suelen insertar materias corrosivas en la vagina para favorecer la cicatrización.
Pero cerca de una quinta parte de todas las mutilaciones se lleva a cabo ahora por trabajadores de la salud y en el ámbito hospitalario -clínicas a medida que utilizan bisturís y antisépticos- y la tendencia a la medicalización es cada vez mayor, según la Organización Mundial de la Salud.

Ablación en hospitales

Esto es en parte para contrarrestar el argumento de que la ablación no es un procedimiento seguro. Un gran riesgo es el sangrado y la infección; al hacerse en una clínica estos riesgos pueden ser minimizados.
Otra razón de peso es el dinero. Los médicos y las parteras en los países pobres pueden aumentar su salario mediante la venta de estos servicios.
Efua Dorkenoo, asesora de la ONG Equality Now, que ha estado haciendo campaña durante décadas para poner fin a las ablaciones, dijo: "En Egipto, alrededor del 70% de las mutilaciones genitales se realiza por médicos. En Kenia y Nigeria, las parteras locales se están reduciendo".
"Los profesionales de la medicina piensan que si no se puede detener lo mejor es hacerlo en el entorno médico. Y algunos están sacando dinero con ello".

Mutilación de niñas y mujeres de entre 19 y 45 años (por países)

  1. Más del 80%: Egipto, Sudán, Eritrea, Mali, Guinea y Sierra Leona
  2. Entre el 51% y el 80%: Mauritania, Liberia, Burkina Faso y Etiopía
  3. Del 26% al 50%: Senegal, Costa de Marfiol, Chad y Kenia.
  4. Menos del 26%: Nigeria, República Centroiafricana y Yemen.
Fuente: UNICEF
Y no es sólo algo que se hace fuera de occidente. Ha habido numerosos reportes de que la práctica también ocurre en el Reino Unido, a pesar de que es ilegal.
Si bien es difícil hacerse una idea de la escala real del problema, las cifras sugieren, al menos, que 4.000 mujeres y niñas han sido tratadas por mutilación genital en hospitales de Londres desde 2009.
Hasta ahora no ha habido condenas por estos delitos y es algo que ha estado ocurriendo durante décadas, dice Dorkenoo.
Unicef calcula que más de 130 millones de niñas y mujeres en el mundo han sufrido la ablación, sobre todo debido a razones culturales, religiosas y sociales, aunque parece ser que el apoyo a estas prácticas está disminuyendo.
No hay beneficios para la salud pero sí muchos riesgos, incluso aunque el procedimiento se realice en un entorno higiénico.
Uno obvio es el dolor intenso, tanto físico como psicológico.
Las víctimas recuerdan luchar por liberarse mientras eran sujetadas boca abajo, sus piernas separadas a la fuerza para realizar el corte.
Bisturí
Las mutilaciones de genitales a mujeres y niñas cada vez más se realizan en hospitales y clínicas.
Isa, que fue mutilada cuando tenía seis años, recuerda: "Todavía recuerdo los gritos. Todavía puedo recordar la sangre cayendo. Todavía recuerdo el dolor..."
Ella pasó por cirugía reconstructiva y ahora, convertida en partera capacitada, ayuda a otras mujeres que han sufrido lo mismo que ella.
La cirugía puede revertir algunos de los daños pero no se puede restaurar el tejido sensible que se ha eliminado.
Tampoco pueden repararse las heridas emocionales.
Janet Fyle, del Real Colegio de Parteras en Reino Unido, dijo: "Algunas mujeres sufren procesos similares a los soldados que han estado en combate".
"Si fueron secuestradas al ir a buscar agua, por ejemplo, esto resulta un trauma psicológico grave muy difícil de tratar".
Foyle espera que la ablación se convierta pronto en una cosa del pasado.
"Tengo esperanzas de que vamos a acabar con ella en una generación. Al menos en Reino Unido. Las chicas jóvenes son más conscientes de ello. Tenemos que educarlas y capacitarlas".

La presión cultural

Pero también reconoce que esta práctica está profundamente arraigada en muchas culturas y que podría tomar mucho tiempo cambiar eso.
Efua Dorkenoo está de acuerdo: "De la manera más extraña las mujeres se han convertido en las autoras y practicantes de esto y mantienen la tradición. Si se habla con las mujeres afirman que lo quieren porque lo necesitan para ser aceptadas en la sociedad. Es una importante forma de controlar la sexualidad de la mujer".
"Debido a que tiene que ver con la sexualidad, sigue siendo tabú hablar de ello".
En muchos lugares donde se realiza la ablación no hay ninguna ley que lo prohíba, o si existe, no está implementada. Y los políticos han tenido miedo de ir demasiado lejos, dice Dorkenoo, que ha recibido amenazas de muerte por hablar en contra de esta práctica.
"Ahora es el momento de que la comunidad internacional para que esto suceda", dice la Sra. Dorkenoo.

El caso de Asseta


Madre de tres hijos, Asseta fue mutilada cuando tenía siete años. En Burkina Faso, donde vive Asseta, más del 75% de las niñas y mujeres han sufrido la ablación.
Asseta cuenta: "Me dijeron que había algunos huevos para comer - así que yo y mis amigos corrimos para allá, pero cuando llegamos había sangre de las otras chicas por todo el piso. Fue muy difícil - que me cortasen es algo que nunca olvidaré".
"La decisión de no practicar la ablación a mis hijas fue difícil de tomar".
"Ir en contra de la tradición puede ser complicado. Primero hay que convencerse de que la decisión que se está tomando es la mejor. Y se necesitan conocer los hechos para ello".
"Espero que mi hija tenga una vida mejor y mejor salud a causa de mi decisión. Y espero que haga lo mismo con sus hijas y evite que las corten".
La hija de Asseta, Fatmata, de 13 años de edad, dice: "Yo había oído hablar de la mutilación y lo he visto - una amiga mía fue cortada cuando tenía 12 años. Al ver esto me asusté. No quiero que me corten y saber que mis padres no me van a obligar a ello me hace sentir más tranquila".

Contexto

lunes, julio 21, 2014

La odisea del médico que fue en busca del Ébola

La odisea del médico que fue en busca del Ébola

Ébola
En 1976 un joven médico belga se enfrentó a una enfermedad letal en África.
Hace casi 40 años un joven belga viajó a un remoto rincón de la selva congoleña. Su objetivo: ayudar a descubrir por qué tanta gente estaba muriendo de una enfermedad tan desconocida como terrorífica.
En septiembre de 1976 un paquete con una botella térmica azul y brillante llegó al Instituto de Medicina Tropical de Amberes, en Bélgica.
Trabajando en el laboratorio ese día estaba Peter Piot, un científico de 27 años y graduado de la escuela de medicina, empleado como pasante de microbiología clínica.
"Era una botella normal y corriente como la que usarías para mantener el café caliente", recuerda Piot, ahora director de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres.
Pero ese termo no llevaba café, sino algo totalmente diferente. Entre unos cuantos cubitos de hielo había varias muestras de sangre y una nota.
La nota estaba firmada por un doctor belga; venía desde Zaire, la actual República Democrática del Congo, y explicaba que la sangre era de una monja, también belga, que había caído enferma de una misteriosa condición sin identificar.
Este raro paquete había viajado desde la capital, Kinshasa, en un vuelo comercial, de la mano de uno de los pasajeros.
"Cuando abrimos la botella observamos que uno de los tubos estaba roto y la sangre se mezclaba con el agua descongelada de los cubitos de hielo", afirma Piot.
Él y sus colegas no eran conscientes del peligro que estaban corriendo: la sangre contenía un virus desconocido y mortal.
Las muestras se manejaron como cualquier otra, pero cuando los científicos miraron la sangre en el microscopio vieron algo que no esperaban.
Ébola
El virus del Ébola es inusualmente grande.
"Vimos una estructura gigantesca con forma de gusano", dice Piot. "Es una forma muy inusual para un virus; solo uno se le parecía, y era el virus Marburg."
El virus Marburg fue observado por primera vez en 1967 cuando 31 personas enfermaron con fiebre hemorrágica en las ciudades de Marburg y Frankfurt, en Alemania, y en Belgrado, la capital de Yugoslavia. El brote estuvo asociado a personal de laboratorio que estaba trabajando con monos infectados procedentes de Uganda. Siete personas murieron.
Piot sabía de la seriedad de Margburg, pero tras hablar con expertos del mundo entero tuvo confirmación de que lo que veía en el microscopio no era Marburg: era algo distinto, algo nunca visto.
"Es difícil de describir pero lo que sentí fue un entusiasmo increíble", afirma Piot. "Había una sensación de privilegio: era un momento de descubrimiento".
Hasta Amberes llegaron las noticias de que la monja de la que procedía la sangre, que estaba bajo cuidado de un doctor en Zaire, había muerto.
El equipo también supo de otros que habían enfermado del misterioso mal en un área remota del norte del país – los síntomas incluían fiebre, diarrea y vómitos, seguido de sangrado y posteriormente la muerte.
Dos semanas después Piot, que nunca había estado en África, embarcaba en un vuelo hacia Kinshasa. "Fue un vuelo nocturno y no pude dormir. Estaba muy entusiasmado por ver el continente por primera vez, por investigar este virus y por parar la epidemia".
El viaje no terminó en Kinshasa –el equipo tuvo que viajar al centro del brote, un pueblo en el bosque tropical, unos 1.000km más al norte.
"El médico personal del presidente Mobutu, el líder de Zaire en esos momentos, nos arregló el transporte aéreo", recuerda Piot. Metieron en una camioneta gasolina y todo el equipo necesario y la subieron a un avión.
Río Ébola
El río Ébola en 1976.
Cuando aterrizaron en Bumba, un puerto en el punto más al norte del río Congo, el miedo que rodeaba la misteriosa enfermedad era tangible. Incluso los pilotos no se querían quedar demasiado, ya que mantuvieron los motores en marcha durante la descarga. No tardaron mucho en irse.
"No tuve miedo. Las ganas de parar la epidemia podían con todo. Habíamos oído que había mucha más gente muriendo que lo que habíamos pensado inicialmente y queríamos ponernos a trabajar en seguida", dijo Piot.
Pero todavía quedaba camino por recorrer. El destino final del equipo era el pueblo de Yambuku, a unos 120 kilómetros de Bumba, el lugar de aterrizaje.
En Yambuku había una antigua misión católica – había un hospital y una escuela que llevaban un grupo de monjas y sacerdotes, todos belgas.
"El lugar era precioso. La misión estaba rodeada de exuberante selva y la tierra era roja – la naturaleza era muy rica pero la gente muy pobre", recuerda Piot.
La belleza de Yambuku ocultaba el horror que azotaba a los que allí vivían.
Cuando Piot llegó, las primeras personas que conoció fueron un grupo de monjas y un sacerdote que se habían retirado a una casa de huéspedes y establecido su propio cordón sanitario - una barrera utilizada para prevenir la propagación de la enfermedad.
Había un cartel en el cordón, escrito en el idioma local lingala, que decía: "Por favor no entres, cualquiera que cruce puede morir."
Mapa
Para investigar la difusión del virus el equipo médico dibujó un mapa con todos los pueblos que visitó.
"Ya habían perdido a cuatro de sus colegas debido a la enfermedad", dice Piot. "Estaban rezando y esperando la muerte."
Piot saltó el cerco y les dijo que el equipo les ayudaría y que detendrían la epidemia. "Cuando uno tiene 27 está lleno de confianza", dice Piot.
Las monjas le dijeron a los científicos lo que había sucedido; hablaron sobre sus colegas y los del pueblo que habían muerto y la forma en que trataron de ayudar lo mejor que pudieron.
La prioridad era detener la epidemia, pero primero el equipo debía averiguar cómo el virus pasaba de persona a persona - por aire, por la comida, por contacto directo o transmitida por insectos. "Tuvimos que empezar a hacer preguntas. Fue realmente como una historia de detectives", dice Piot.
Estas fueron las tres preguntas que hicieron:
  • ¿Cómo evolucionó la epidemia? Saber cuándo cada persona contrajo el virus dio pistas sobre qué tipo de infección era - a partir de aquí la historia del virus comenzó a tomar forma.
  • ¿De dónde vienen las personas infectadas? El equipo visitó todos los pueblos de los alrededores y registró el número de infecciones - estaba claro que el brote estaba estrechamente relacionado con las áreas atendidas por el hospital local.
  • ¿Quién se infecta? El equipo descubrió que más mujeres que hombres contrajeron la enfermedad y sobre todo mujeres de entre 18 y 30 años de edad - se descubrió que muchas de las mujeres estaban embarazadas y muchas habían asistido a una clínica prenatal en el hospital.
Piot
Piot, a la derecha, en el Instituto de Medicina Tropical de Amberes en 1976,
El misterio del virus estaba empezando a resolverse.
Posteriormente el equipo descubrió que las mujeres que asistieron a la clínica prenatal recibieron una inyección rutinaria. Cada mañana se repartían solo cinco jeringillas que se reutilizaban, y así el virus se esparció entre los pacientes.
"Así es como empezamos a entenderlo", recuerda Piot. "Se hace hablando, mirando las estadísticas y usando la deducción lógica."
El equipo también se dio cuenta de que la gente contraía la enfermadad después de asistir a los funerales. Cuando alguien muere a causa de Ébola el cuerpo está lleno de virus - todo contacto directo, como el lavado o preparación de la persona fallecida, sin protección, puede ser un riesgo grave.
El siguiente paso consistió en detener la transmisión del virus.
"Fuimos de pueblo en pueblo y si alguien estaba enfermo lo poníamos en cuarentena", dice Piot. "También poníamos en cuarentena a cualquier persona en contacto directo con infectados y nos asegurábamos que todos sabían cómo enterrar correctamente a los que habían muerto a causa del virus."
El cierre del hospital, el uso de la cuarentena y asegurarse de que la comunidad tenía toda la información necesaria, finalmente, pusieron fin a la epidemia - pero cerca de 300 personas murieron.
Piot y sus colegas habían aprendido mucho sobre el virus durante tres meses en Yambuku, pero todavía faltaba un nombre.
"No queríamos ponerle el nombre de la localidad, Yambuku, porque era muy estigmatizante. Nadie quiere estar asociado con eso", dice Piot.
Equipo
El equipo se trasladó a una selva remota con todo lo necesario para llevar a cabo su trabajo.
El equipo decidió nombrar al virus como a un río. Tenían un mapa de Zaire, aunque no muy detallado, y el río más cercano que podían ver era el río Ébola. A partir de ahí, el virus que llegó en un termo desde Amberes meses antes sería conocido como el virus del Ébola.
En febrero de 2014 Piot regresó a Yambuku por segunda vez desde 1976 con motivo de su 65 cumpleaños. Allí se encontró con Sukato Mandzomba, uno de los pocos que contrajo el virus en 1976 y sobrevivió. "Fue fantástico volver a verlo, fue un momento muy emotivo", dice Piot.
En aquel entonces, Mandzomba era enfermero en el hospital local y hablaba francés, así que ambos llegaron a entenderse muy bien. "Él todavía está viviendo en Yambuku y sigue trabajando en el hospital. Lleva el laboratorio allí y es impecable. Me quedé muy impresionado", dice Piot.
Ya hace 38 años desde aquel brote inicial y el mundo está experimentando su peor epidemia de Ébola.
Hasta el momento más de 600 personas han muerto en los países de África occidental de Guinea, Liberia y Sierra Leona. La situación actual ha sido calificada como sin precedentes, y la propagación de la enfermedad a través de tres países hace que controlarla sea más complicado que nunca.
En ausencia de una vacuna o una cura, los consejos durante de este brote son similares a los que se daban en la década de 1970. "Jabón, guantes, aislar a los pacientes, no reutilizar las jeringas y poner en cuarentena a los que hayan tenido contacto con los enfermos. En teoría, debería ser muy fácil de contener el Ébola", dice Piot.
Piot
Piot volvió a la zona en 2014.
En la práctica, sin embargo, otros factores pueden hacer que la lucha contra un brote sea una tarea difícil. Las personas que se enferman y sus familias pueden ser estigmatizadas por la comunidad, lo que resulta en una renuncia a acudir en busca de ayuda. Las creencias culturales llevan a algunos a pensar que la enfermedad es causada por la brujería, mientras que otros son hostiles hacia los trabajadores de la salud.
"No debemos olvidar que esta es una enfermedad de la pobreza, de los sistemas de salud disfuncionales y de la desconfianza", dice Piot.
Por esta razón la información, la comunicación y la participación de los líderes de la comunidad son tan importantes como el enfoque médico clásico, argumenta.
El Ébola cambió la vida de Piot. Tras el descubrimiento del virus pasó a investigar la epidemia del sida en África y se convirtió en el director ejecutivo de la fundación de la organización UNAIDS.
"Esto me llevó a hacer cosas que pensé que sólo ocurrían en los libros. Me dio una misión en la vida para trabajar en salud en los países en desarrollo", dice.
"No fue sólo el descubrimiento de un virus, sino también de mí mismo."

Contexto

QUE HACRE SI TIENS SINTOMAS, ERES SOSPECHOSO O CONTATO

Aislarse, hacerse la prueba y avisar. Una guía detallada de qué hacer si hay sospecha de COVID-19 Los casos confirmados y las atenciones hos...