Avances y desigualdades en el Perú
Categoría: Anesvad
Aquí estoy, nuevamente en el aeropuerto de Lima, ahora con destino Piura. Detrás queda ya el largo y agotador viaje Bilbao-Lima, así como el atribulado “doble” viaje de Lima a Iquitos. En el primer intento, salí a las 05:30 de la mañana y, cuando estábamos a poco menos de 10 minutos de aterrizar, nos informaron de que no iba a ser posible a causa de la niebla. Desde ahí, nos hicieron regresar a mi "nueva casa" (el aeropuerto Jorge Chávez de Lima) en donde pasé las siguientes 8 horas hasta mi segundo -y esta vez exitoso- intento para llegar a la amazonia peruana.
Datos crudos: casi 4 días de viaje, 88 horas -más o menos hasta ahora- de las cuales cerca de un cuarto pasaron volando, casi otro cuarto en el aeropuerto y el resto para visitar zonas de intervención del proyecto, reuniones, comer, dormir e intentar conectarme en internet.
Lo bueno es que uno siempre aprende, y sin duda que la visita a Iquitos me ha hecho reflexionar sobre algunos temas y cuestionar algunas certezas vinculadas a la necesidad o no de seguir trabajando en países que ya han avanzado hacia niveles de desarrollo considerables.
Perú ha avanzado mucho hacia el cumplimiento de los ODMs (marcados para 2015). Actualmente se encuentra dentro del rango de países de desarrollo medio alto, motivo por el que empieza a ser excluído de las convocatorias públicas de ayuda al desarrollo y razón determinante para que algunos de los actores de la cooperación hayan decidido irse del país.
Sin embargo, nada como una visita a las zonas periféricas y no turísticas de la mayoría de las ciudades peruanas –escenario que se repite en el continente desde el atlántico, pasando por la amazonia, escalando los andes y llegando al pacifico- para que se nos olviden los promedios nacionales y nos caiga encima la desigualdad real y la inequidad existente.
Ya había estado en contextos similares, pero a medida que caminábamos por los barrios periféricos o nos deslizábamos por el rio no podía parar de pensar en el nivel de militancia e implicación de las organizaciones de la sociedad civil, en la increíble capacidad de adaptación del ser humano, ni de sorprenderme con la dimensión y profundidad de la pobreza (in)visible.
Artículo escrito desde Perú por Pedro Landim, del equipo de proyectos del área de Bolivia y Perú
No hay comentarios.:
Publicar un comentario